La apuesta por un mundo en paz parece una utopía, tomando el pulso que hay hoy en día en muchas regiones del planeta.El pretender una reconciliación entre Occidente y el mundo musulmán y árabe con propuestas como la Alianza de Civilizaciones presentada en la ONU por Jose Luis Rdguez Zapatero es un paso para acercar posturas distantes por visiones muy distintas de la concepción del mundo y del hombre en él. Son muchos los países que se han adherido a este iniciativa.
El intentar evitar ese choque ideológico en sus políticas y valores hace que el esfuerzo de diálogo sea necesario; apesar de lo que algunos han dicho sobre el buenismo tan denostado y que no sirve para nada.
Las actuaciones de nuestro presente siguen siendo intolerantes y demostrando que estamos muy lejos de ese entendimiento necesario para una mejor convivencia, con mayor conocimiento del otro, y con una cooperación estrecha para aunar esfuerzos en aras de esa PAZ tan deseada.
Estamos en un momento de la Historia crítico, pues las tensiones en la zona de Oriente Medio y en ocasiones la pasividad de Occidente puede acarrear un conflicto de una envergadura tal que nos tengamos que lamentar, por no ser conscientes de que es ahora cuando la diplomacia y buena política tiene que resolver ese abismo entre culturas que están condenadas a entenderse.
Es algo que los ciudadanos de bien exigimos.
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