SANIDAD BASURA

Menos mal que tenemos una sanidad pública!!!JA!Qué broma es esta!

Con eso de que ahora la Seguridad Social está descentralizada en las distintas comunidades autónomas, y compete a ellas su gestión estamos listos.

Todo es politiqueo, y al paciente pues no le queda otra que ser muy paciente, si quiere le resuelvan su asunto, aunque vaya por urgencias.

Hay una descordinacción total entre los distintos servicios, y para que te atiendan pues ni muriéndote. Se tiene que buscar la vida por sus propios medios para que le hagan algún caso.

Estamos viendo que el personal dice que está a tope y que se necesita más gente( no contratos basura, eventuales no cualificados, y fuga de médicos a países como Inglaterra y Estados Unidos que son mejor pagados) para realizar las labores para un mejor funcionamiento, pero claro, la pasta no aparece por ningún lado, y es que los políticos se llenan la boca diciendo que invierten tanto y cuanto en instalaciones sanitarias, pero es indignante el estado en el que está todo( con camas por el pasillo, habitaciones con overbooking, pruebas inconclusas,etc), y las cuentas no salen, pues se presupuesta una cosa, y acaba costando más del doble.

Los profesionales están saturados en las consultas diarias de primaria, no prestando atención a quien acude a ellos, y despachan en un plis plas, sin dar a veces un buen diagnóstico, lo que puede llevar a negligencias que luego se cuidan muy mucho en negar.

Y si hablamos de los vericuetos de las listas de espera que decir: vergonzoso. A más de un año vista para consultas de dolencias a veces muy severas, y con posibles empeoramiento.

Luego el gasto sanitario( farmaceútico) es elevado, lo que provoca un déficit en la sanidad que según nuestra constitución tiene que ser pública y para todos los españoles, cosa que descubrimos que no cubre, una insuficiencia financiera que repercute en el bienestar de los españolitos de a pie.

La atención que se hace en los centros hospitalarios deja mucho que desear, desde admisión hasta que te dan el alta, y lo sufrimos sin quejarnos, y si nos quejamos sin que nuestras quejas tengan la respuesta que esperamos.

Mientras dejemos pasar algo tan delicado como nuestra salud, las cosas no pueden ir bien, y no se pueden aplaudir las grandezas del sistema.

Bueno y la sanidad privada, no se queda a la zaga. Pero en este país nunca pasa nada.¡Es fantástico!